Descubre cómo fijar objetivos de manera exitosa

¿Cuántas veces has querido querer alcanzar un propósito y quedarte en medio del camino? Conseguir ese ascenso en el trabajo, lograr más momentos de descanso, intentar conciliar mejor vida familiar y laboral, dedicar más tiempo a una afición o lograr tener más momentos de conversación con tus hijos…

Tener objetivos en la vida resulta muy positivo ya que nos brinda un sentido de dirección, genera seguridad, favorece la motivación y nos ayuda a establecer y ordenar nuestras prioridades. Saber qué es lo que queremos en nuestra vida es el primer paso para conseguirlo, pero muchas veces, la inmediatez y la falta de espacios de reflexión, hace que nos cueste definir cuál es esa meta concreta a la que aspiramos.

El abanico de objetivos a los que aspirar resulta bastante amplio y más en una sociedad tecnológica donde “lo aspiracional” se mueve constantemente a golpe de likes en las redes sociales. 

Quiero estar más fit como me anima esa influencer, quiero irme de viaje a tal destino como ese otro youtuber, quiero ir a clases de alfarería por los platos tan monos que sube mi amiga en las redes sociales…

Conocer nuestro objetivo es el primer paso, pero hay que saber definirlo de manera precisa para que sea más fácil conseguirlo.

Por ello, antes de hablar de hábitos propiamente, resulta fundamental hacer una pequeña distinción y fijar eficazmente cuáles son nuestros objetivos.

Objetivos Vs. hábitos 

Cuando hablamos de objetivos y hábitos, parece que mencionamos una misma realidad por eso es necesario empezar distinguiendo ambos conceptos.

El objetivo es el resultado, el punto final al que queremos llegar. Abarca lo que queremos lograr o alcanzar. Ej. Quiero dejar de usar tanto el móvil. 

El hábito, en cambio, son los comportamientos y las elecciones que repetiremos en el tiempo para conseguir ese objetivo. Es decir, el “cómo” planearemos lograr nuestro objetivo, el “proceso” que nos llevará a ello.  Ej. Para dejar de usar tanto el móvil, voy a tener que empezar apagando todos los días el móvil 1 hora antes de dormir.

Un error típico a la hora de marcarnos objetivos es centrarnos exclusivamente en el resultado (que no está 100% bajo nuestro control) y desatender el proceso (hábitos) que sí que están 100% bajo nuestro control.

Sin objetivo no hay hábitos y sin hábitos no hay objetivo. Si queremos un cambio en nuestra vida, tenemos que prestar atención a ambos aspectos.

Definir objetivos SMART

Sabiendo que es importante focalizarnos en el proceso para conseguir un resultado, es importante dar el primer paso definiendo muy bien ese objetivo que queremos incluir en nuestra vida.

Para definir objetivos de manera completa y exitosa existe una metodología conocida como SMART GOALS muy interesante de seguir. Siguiendo las siglas del acrónimo inglés, los objetivos deben ser: Específicos (Specific), Medibles (Measurable), Alcanzables (Achievable), Realistas (Realistic) y Temporal (Time-bound)

  • Específicos (Specific):  ser específicos ayuda a definir con precisión qué se quiere lograr, lo que nos brinda un mayor enfoque y claridad a la hora de querer alcanzarlo.
  • Medibles (Measurable): al ser medibles permiten cuantificar el progreso hacia nuestro logro, lo que facilita el seguimiento y la evaluación del éxito.
  • Alcanzables (Achievable): apunta a que los objetivos deben ser realistas y factibles de alcanzar, evitando establecer metas poco accesibles que puedan generar frustración o desmotivación.
  • Relevancia (Relevant): debe estar alineado con tus valores y satisfacer tus necesidades y metas más amplias.
  • Temporal (Time-bound): la inclusión de un marco temporal definido ayuda a establecer un sentido de urgencia y prioridad, lo que nos impulsa a llevarlo a cabo.

Os ponemos un ejemplo de cómo se llevaría a la práctica.

Objetivo normal: No usar tanto el móvil.

Objetivo SMART: Reducir mi tiempo de uso del móvil en un 50% durante las próximas cuatro semanas aprovechando que comienza el curso.

  • S:reducir mi tiempo de uso del móvil. (No decimos “no usar”, si no especificamos formulando la palabra “reducir”)
  • M: Miro la batería que tengo cuando me voy a la cama.
  • A: Reducir el uso a la mitad.
  • R: aprovechando que comienza el curso escolar (es relevante que aproveches este momento para tener buenos tiempos de estudio y descansar bien por la noche)
  • T:hasta noviembre
  • Una vez definido tu objetivo, el siguiente paso es trazar o diseñar un plan de acción basado en la conquista de pequeños hábitos y lo veremos en el próximo mes de octubre.

 

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